jueves, 19 de febrero de 2009

Corona. 1940




La corona tradicional de la Santísima Virgen, fue realizada expresamente para nuestra actual titular, tras ser destruida la anterior imagen y con ella la mayor parte de su ajuar.

Esta corona fue realizada en 1940 en joyería Valdés en Sevilla, prestigiosa casa de la que salió entre otras la corona de la Virgen de la Presentación de la Hermandad del Calvario. A diferencia de la anteriormente mencionada, con unas características muy identificativas, la corona de nuestra Amantísima Titular, reproduce con bastante exactitud las líneas de la corona realizada en 1850 y que fue destruida en la Guerra Civil. De inspiración neoclásica y con reminiscencias barrocas, se caracteriza por su formato levemente apaisado, su canasto bajo, altos imperiales, y resplandor de motivos vegetales y rayos biselados, rematando el conjunto la cruz sobre el orbe.

Fue donada por la que por aquel entonces era camarera de la Virgen, Dña. María Teresa Vides y su esposo D. Joaquín Moreno, como aparece grabado en la cruceta de la corona.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Antiguos altares de novena (III)


Esta fotografía esta datada entre entre los años 40 y 1958, en que se bendijo el actual altar mayor de la Parroquia. En ella, a difernecia de en las fotografías anteriores, podemos observar a nuestra titular bajo un dosel con el escudo de la parroquia en el el altar montado para la solemne novena. El altar es levemente de menor tamaño, aunque aparece adornado por profusión de jarras con flores de tela, así como candeleros con cera. A ambos lados del altra pueen observarse dos doseles, que servían de ornato en el altar mayor mientras se realizaba el retablo. El frontal y el paño bordado son los mismos que en fotografías anteriores. Como curiosidad destacar la instalación electrica en varios candelabros, así como el manifestado en madera dorada que adquirió por aquellas fechas la parroquia.

Esta instantánea fue elegida como cartel del LXXV aniversario de la refundación de la hermandad al constituirse la Asociación y Corte de honor.

Antiguos altares de novena (II)

Esta segunda fotografía debe ser posterior a 1940, puesto que ya aparece la actual imagen de la Virgen. El altar es en líneas generales el mismo, anterior a la Guerra Civil, aunque con algunas diferencias en su ornato y composición, como por ejemplo el no aparecer ya las lámparas de araña ni la guirnalda de flores. El manifestador parece también distinto.
Posiblemene, por la suntuosidad del altar, estemos ante la primera novena de la Santísima Virgen una vez realizada, es decir , la del año 1940, ya que en las fotografás posteriores no se observa ya el fondo de damasco y galones.

domingo, 15 de febrero de 2009

Antiguos altares de novena (I)


La primera de esta serie de fotografías puede datarse entre los años finales de la década de los años veinte y el año 1935, puesto que preside el altar la antigua imagen titular.

Este se compone de un fondo a media altura de tela adamascada y galones dorados, así como a mayor altura un dosel del mismo tejido, ambos rematados por una gotera de perfiles curvos. Sobre 4 gradas se alza la imagen de la Virgen, a su vez descansado sobre la peana del antiguo paso de 1850. Componen el exorno del altra profusión de candeleros de orfebrería, "palmas", "palmas lunas" y "escalinatas" con ceras de un calibre bastante mas fino que en la actualidad, así como dos juegos de candelabros con guardabrisas. Se adorna con flores de tela, macetas, y una original quirnalda de flores sobre el fondo del dosel. Completan el conjunto un manifestador con la custodia renacentista de la Parroquia y dos imágens de santas de pequeño tamaño que no logramos indentificar. Las distintas gradas son de color claro, no apreciándose si realizadas en madera pintada o forrada de tela. Si puede observarse con claridad el frontal de altar de tela brocada muy similar al antiguo manto de la Virgen así como el paño de tul bordado en hojilla que lo remata. también merecen ser destacadas las distintas lámparas de araña quie aparecen distribuida por el presbiterio, muy habituales en los altares de la época, así como los dos apliques con velas situados sobre el dosel a la altura de la corona de la Virgen.

viernes, 13 de febrero de 2009

El paso de 1926





El paso realizado en 1850 fue sustituido en 1926, probablemente por el deterioro del anterior, acompañado de los cambios de gustos y del auge devocional de aquellos años. Este nuevo paso fue realizado en Sevilla por el tallista D.Francisco Ruiz Rodríguez "Currito el dorador", por un valor de 4.55o ptas. que fueron abonadas por la hermandad mediante las limosnas recaudadas entre los asociados.

El nuevo paso rompía totalmente con las líneas del anterior, y se constituía por aquellas fechas como un paso novedoso en el panorama de la villa, al seguir las líneas tradicionales de los pasos de gloria sevillanos.

En las fotografías que adjuntamos, puede observarse como el paso, de madera dorada, poseía estructura cuadrada con canastilla tallada de perfiles rectos, y una muy desarrollada peana. Ésta constaba de un gran jarrón central y cuatro tornapuntas o "eses" en las esquinas. La canastilla se decoraba con pequeñas cartelas que representaban aparentemente imágenes de la Virgen con distintas advocaciones populares. Completaban el paso cuatro candelabros de tres brazos con guardabrisas, de madera tallada, y seis jarras para flores también de madera dorada.

Del análisis de las fotografías conservardas, podemos observar como ya la Virgen ha dejado de ser vestida, muy posiblemente desde 1934 en que fuera restaurada, por lo que no podemos concretar si durante el intervalo desde 1926 a dicho año la Virgen procesionó en estas nuevas andas sobrevestida. Igualmente en dichas instantáneas porta la Virgen el manto que estrenó el mismo año 1926. A diferencia de en fotografías de la Virgen en el paso anterior, e incluso coetáneas a las mismas pero en las que aparece la Virgen solamente, no aparece el sillón blanco y dorado que se realizó en 1850, sino una jamuga de líneas isabelinas completamente dorado. Igualmente se ha acoplado a los pies de la imagen un cojín de madera tallada. Muy posiblemente tanto el nuevo sillón como el cojín fuesen realizdos en fechas cercanas al estreno del paso,y por el mismo autor. Por ello, podemos varajar la hipótesis de que el antigua lo usara la Virgen a diario, mientras que para la salida procesional usase el nuevo.

Es muy interesante también la forma en que lleva puesto el manto la Santísima Virgen, pues es totalmente diferente a la actual. El manto, de dimensiones bastante mayores que los que hasta el momento había venido usando la imagen, y que eran cruzdos sobre sus piernas, ahora partía en forma de capa desde sus hombros, y la Virgen se sentaba sobre él. La larga cola, en vez de rmetida entre las patas de la jamuga para caer por detrás, ya que posiblemnet esta opción fuese complicada al estra bordado, caía de forma natural sobre el lado derecho de la peana. Por ello, tenía hasta su restauración el manto un orificio a la altura en que la Virgen era sujetada al sillón. Esta forma de portar el manto, realmente más lógica y natural que la actual, fue sustituida con la realización de nuestra actual Amantísima Titular, pues desde entonces, y tras dos años sin portarlo porque no se encontraba forma de colocárselo, se le abrieron dos costuras en la espalda, para ser colocado desde la parte trasera, extendiéndose hasta la canastilla del paso.

jueves, 12 de febrero de 2009

Las andas procesionales del s.XIX






Aunque es 1677 la fecha más antigua de la que hay noticias de la procesión de la Santísima Virgen, no es hasta mediados del s.XIX cuando se recoge porprimera vez noticia alguna sobre las andas en las que la Virgen procesionaba. Las más antiguas documentadas las cita D. Celestino Maestre en un invetario de 1844. Indica que llevaban seis maniguetas, a las que se colocaban sus soportes o muletas al hacer las paradas. Disponían estas andas de un "cajón con fechadura" probablemente para guardar donaciones.

En 1850 D. Celestino, inmerso en una etapa de mejora y renovación del patrimonio de la ermita, de la que era capellán, encarga la realización de unas nuevas andas. Éstas fueron realizadas por el José Cayetano Domínguez y el pintor José Antonio Moreno. Fueron presupuestadas en 2.914 reales, aunque las cuentas de pago definitivas citan 1360 reales por la talla y 2.830 por la pintura. Estas andas llevaban un pequeño palio, pues sabemos que en Agosto de 1859 se trae de Cadiz un hule fino con ramos plateados "para el cielo de las andas doradas". LLevaba también el paso nueve lunas o espejos traidos de Cadiz.

En las fotografías de principios de siglo aparece un paso que es posiblemente el antes mencionado, aún no coincidiendo en la descripción sobre el dorado. No sabemos si con ellos hacía refernacia a lasmolduras doradas,o a que en su origen el paso era dorado completamente. El paso al que hacemos mención estaba formado por una estructura cuadrada cuya canastilla llevaba una franja decorada con cabezas de ángeles en las esquinas y en el centro,y tallas rodeando pequeños espejos en las zonas intermedias. Sobre la canastilla iba una pequeña peana central sin decoración, y sobre ella la peana que tenía normalmente la Virgen en su altar. En las esquinas llevaba cuatro jarrones de madera para flores, y delante de la imagen dos candelabros de metal con guardabrisas figurando ángeles que sostienen los tres brazos. Se observan también en los extremos delanteros lo que podrían ser los basamentos de los varales del palio que llevó en su día,en las instantaneas con una vela introdica en la cabidad. El conjunto iba pintado de color claro, probablemente blanco, con resaltes en oro y decoración de flores pintadas en los jarrones y la peana. Finalmente se componía elexorno de las andas de algunos candeleros más con cera,y flores de tela y talco en las jarras.

En esta paso procesionaría la Virgen, tanto para el tralsado como para la procesión de subida, desde dicho año hasta 1926 en que estrena uno en madera dorada.

La antigua imagen de la Virgen (VIII)



Adjuntamos estas dos últimas fotografías juntas, aún existiendo bastante distancia entre ambas tanto en calidad como en perspectiva, porque son las dos únicas que se conservan de las facciones del rostro de la Virgen desde mayor cercanía.
Mientras en la primera de ellas la Virgen aparece vista levemente desde la izquierda, desde la altura de las riodillas hacia arriba, a excepción de la mano derecha, en la segunda se muestra a la Virgen en un primer plano, de cintura para arriba,y el niño casi completamente. En ambas aparecen la Santísima Virgen con los mismos aditamentos,pero por su mayor calidad, pueden apreciarse con más nitidez en la primera de ellas.
Por la mencionada cercanía, podemos destacar de estas instantáneas, a parte de la extraordinaria belleza de la imagen, a la que hicimos referencia en la anterior entrada, a las joyas que porta la Virgen. Como ya hemos mencionado anteriormente, se trata de un juego de gargantilla y pendientes, que por su estilo y trabajo pueden datarse en el s.XVIII. Ambas piezas están realizadas en oro y varios brillantes, con un exquisito trabajo con motivos minúsculos siguendo un diseño puramente barroco. El colgante central de la gargantilla prende de un collar de pequeñas bolas caladas de oro. Como detalle puede observarse que la Virgen porta en la mano derecha un anillo, suponemos que de las mismas características que los demás aderezos. Como en otras fotografías, el rosario de oro aparece dispuesto de una forma muy personal en la corona,colgando desde la cruz, abriéndose en la rafaga, y reposando la cruz sobre el canasto.
Podemos observar también como la antigua imagen era de tamaño algo menor que la actual, ya que por fortuna estas joyas aún se conservan, y las luce nuestra Amantísima Titular en sus fiestas principales y en su besamano de mayo.