Desde la Hermandad de Nuestra Señora de Consolación mostramos nuestro más profundo pesar tras los atentados acaecidos en la noche de ayer en París, en el que tantos inocentes han fallecido y otros muchos han resultado heridos. Ante una situación tan difícil y dolorosa, elevamos nuestras oraciones a la Santísima Virgen, suplicando que interceda ante el Padre para que de consuelo a tantos familiares y amigos que hoy lo necesitan y salud a los enfermos. Rogamos a Nuestra Madre para que por su intercesión, el Señor toque con su gracia los corazones de todos los seres humanos y que, mediante la reconciliación de los pueblos, cese la violencia definitivamente en nombre de Dios.
Hoy, unidos en torno a Nuestra Madre Bendita de Consolación, que siempre ha protegido a sus hijos en las mayores tribulaciones, nos dirigimos a Ella:
"Como Madre de Afligidos,
y siempre Consoladora,
te suplicamos, Señora,
escuches nuestros gemidos
y seamos socorridos
con tu dulce protección.
Esperamos el remedio,
Virgen de Consolación".
Descansen en paz.
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